https://www.comillas.es/wp-content/themes/comillas/images/cabecera-planifica.png

Sto. Hospital de Comillas

Arquitecto: Cristóbal Cascante
Constructor: Placido Díaz de La Campa
Año de construcción: 1885
Periodo: Modernismo

Construido en el año 1888 y de estilo modernista, sigue el modelo del Palacio de Sobrellano. Se eleva en torno a un patio central y en su fachada principal se aprecia un pórtico escalonado donde se levanta la capilla y una galería de madera al estilo montañés.

Claudio López y López se lo mandaron construir a Cristóbal Cascante, para el cuidado de enfermos y de asilados. En la actualidad siguen en funcionamiento, prestando sus servicios las Hijas de  San José y lo administra un Patronato.

Actual residencia geriátrica, edificio no visitable interiormente. Se puede observar la fachada del monumento, que tiene suelo accesible. 

 

La Coteruca

Año de construcción: 1870 – 1871
Periodo: Historicismo francés

En principio era la casa de verano de la familia Riera y posteriormente la morada permanente del Marques de Movellan, quien la heredó. Este edificio fue construido siguiendo planos traídos de Francia.

La solución “acastillada” esta remarcada por la espectacularidad paisajística del emplazamiento en lo alto de una colina que asoma al mar.

Todo el conjunto, desde el perfil almenado y las cresterías férreas hasta el aspecto de ruina gótica del cerramiento, es una búsqueda del aspecto pictórico-pintoresco.

En el muro almenado de la casa aparece un escudo de piedra en el que sobresale de la corona del escudo un brazo armado empuñando una daga o puñal (hoy desparecida); se repite el motivo en uno de los cuarteles donde se aprecia claramente un caballero de medio cuerpo con armadura y tocado.

En la chimenea del Palacio de Sobrellano, se colocó un emblema tallado en madera, donde se representa otro brazo igualmente armado de puñal con leyenda de los Bracho.

La guerra civil solo perdonó sus torres cuadradas y los muros limítrofes, destruyendo todo lo demás. En 1990 el edificio fue rehabilitado en edificio de apartamentos.

Actualmente, se trata de una urbanización privada, acceso al interior solo para residentes.

 

Puerta de Moro

Arquitecto: Gaudí
Dirección: Julián Bardier Pardo
Año de construcción: 1900
Periodo: Modernismo

Pertenece a la casa de Moro, que tiene una enorme efigie del Sagrado Corazón de Jesús, sobre la fachada de su torre cuadrada.

En 1900 se acuerda la construcción de esta portilla para coches. Este procedimiento, tan simple, tan sintético a base de desechos de piedra que se destruyen y se recomponen como hicieran más tarde los pintores cubistas con los objetos cotidianos y que se había utilizado desde siempre en la construcción de muretes, Gaudí lo magnifica y lo manipula para darle una nueva utilidad , llena de fantasía y rigor.

Además de una puerta para coches y para peatones goza de un agujero en el muro, por ello la llamaría “la Puerta de los Pájaros”.

Las superficies onduladas, las esquinas redondeadas, los volúmenes curvos de esta puerta serán un punto de referencia en la ruptura lingüística del arquitecto, quien se abre aquí a la modernidad.

Monumento a pie de calle accesible a través de Paseo Santa Lucía.

 

Monumento al Marqués de Comillas

Arquitecto: Doménech y Montaner
Dirige: Cascante
Año de construcción: 1890
Periodo: Modernista

El indiano don Antonio López y López, cuyo ascenso económico y social había sido imparable desde su regreso de Cuba y el establecimiento de sus negocios en Barcelona, culminando con la concesión en 1878 del título de marqués de su villa natal (Comillas), como reconocimiento de Alfonso XII al apoyo económico y material prestado en la lucha contra la insurrección cubana.

A partir de este momento la villa de Comillas se personalizó en la figura del marqués levantando un Monumento a su memoria.

Se realizó en el prado de Ángel Pérez, amigo de López, que lo había regalado al pueblo para que acogiera al monumento. También el consistorio recaudo fondos para sufragar gastos.

El proyecto de Cascante, que respeta Doménech, se erige con un original pedestal en forma de proa de barco y la columna sobre la que se levanta la estatua del marques. En ella abundan los temas marítimos y destacaban las estatuas de bronce, con las alegorías de las Antillas y Filipinas (durante la guerra civil se fundieron los bronces de las indias y escudos junto con la figura de López o hoy desaparecidas).

Monumento a pie de calle accesible desde Paseo Juan Martínez Noriega.

 

Cementerio

Arquitecto: Doménech y Montaner
Dirige: Llimona
Año de construcción: 1893
Periodo: Modernismo

Luis Doménech y Montaner proyectara la reforma del cementerio integrando la las ruinas de la antigua ermita gótica en su estructura y proyectando una nueva cerca plagada de elementos pintorescos (pináculos, cruces patadas, arco de acceso).

Como creación paisajística, el proyecto de Domench, pretende enfatizar su aspecto de ruina, recortando sus perfiles con la inclusión de la escultura del Ángel Guardián de Jose LLimona (1894-1985), realizada en mármol y situándola sobre los muros en la nave de la antigua iglesia. Además Domench proyecta, para el cementerio, el panteón de familiar de D. Joaquín del Piélago, con la lápida sobre la ola retorcida por el latiguillo modernista.

Con una mínima actuación logra expresar la sensación de lo eterno, la calma solemne y ambivalente del ángel posando como un pájaro, pero, también de lo caduco a través de la constante presencia de la ruina. Porque aquellas ruinas tenían su historia: unos hechos que comienzan con el zafarrancho que se organizó en la misa de aquel domingo otoñal ya entrado el SXVI, cuando una vieja del pueblo fue forzada a abandonar los sitiales reservados a los duques del infantado, feudatarios de aquellas tierras. Todos a una los feligreses juraron no volver a pisar esa iglesia y decidieron construir una nueva entre los vivos y al abrigo de los vendavales marinos, tierra adentro, en lo que hoy se denomina Bº la Iglesia. Hubo pleitos y más pleitos y, finalmente, se decidió quitar la silla en cuestión pero el pueblo ya había decido abandonar la parroquia antigua y trasladar el culto a la ermita de S. Juan (que hoy ocupa el Ayuntamiento).

Tardaron dos o tres siglos en hacer la nueva iglesia, a costa de su día de fiesta y aquella quedo abandonada.

Tiene una cuesta pendiente y escaleras para acceder. El interior tampoco está adaptado para personas en silla de ruedas.

 

La Universidad Pontificia

Arquitecto: Martorell
Dirige: Cascante
Decoración: Luis Doménech y Montaner
Pintura: Eduardo Llorens (paraninfo), Juan Llimona y José M. Tamborín (iglesia)
Año de construcción: 1883-1892
Estilo: Eclecticismo gótico-mudéjar

Tras la construcción del conjunto Sobrellano solo le restaba al marqués promover una gran “obra pía”, que a la vez de perpetuar su nombre le ayudase a “ganarse el cielo”. Es por ello que estudia la posibilidad de levantar un gran centro docente de segunda enseñanza, finalmente se destinó a Seminario de pobres (posterior Universidad Pontificia) dirigido por los jesuitas, cuyo modelo docente triunfaba desde el SXVII.

La planta del edificio copió la estructura habitual de los edificios de la compañía («il modo nostro”), básicamente se trata de reunir los diferentes apartados del colegio en torno a dos patios porticados.

Se usa una planta rectangular, con la iglesia encuadrada por los dos patios. Se levantan iglesias espaciosas, de fácil acceso desde el interior y exterior, eliminado los coros profundos.

La construcción fue dirigida desde 1883 por Joan Martorell, quien utilizó un eclecticismo gótico-mudéjar muy ornamental, añadiéndose a partir de 1889, la decoración más modernista dirigida por Luis Doménech y Montaner en el paraninfo, iglesia pública, vestíbulo, escalera, puerta de bronce, mosaicos y artesonados, rompiendo la severidad del edifico original.

El Centro está adaptado para personas con movilidad reducida.

La Antigua Universidad Pontificia de Comillas cuenta con aparcamiento privado gratuito para todas las personas que dispongan de la tarjeta de estacionamiento de vehículos para personas con movilidad reducida. La visita al interior del monumento ofrece rutas alternativas para facilitar el acceso a las personas con movilidad reducida o en silla de ruedas. (Es preferible ponerse en contacto previamente).

 

Puerta de la Universidad Pontificia

Arquitecto: Doménech Y Montaner
Año: 1892

Puerta de acceso, ensanchada posteriormente para el transito de vehículos, donde se une el ladrillo, la cerámica con reflejos metálicos y piedra labrada en el escudo, donde aparecen la tiara y las llaves pontificias junto al anagrama jesuítico JHS (Jesús, de los hombres Salvador).

Portando el magnífico escudo aparecen dos niños –pajes ataviados con ricos ropajes en los que se inscribe el año inaugural1892 y el Papa al que ofreció la propiedad del Seminario, León XIII. Por debajo de los pajes, a sus pies, 2 figuras grotescas de clara influencia oriental; coronado el arco con reminiscencias medievales y alusiones a arquitecturas exóticas.

Las puertas de este arco, hoy desaparecidas, tenían adornos en forma de flores de la Pasión, llamada así por la referencia a Jesucristo.

Monumento a pie de calle accesible. Es la puerta de acceso al recinto de la Antigua Universidad Pontificia de Comillas.

 

La Capilla Panteón

Arquitecto: Martorell
Dirige: Camilo Oliveras
Mobiliario: A.Gaudi
Escultura: Llimona y Vallmitjana
Año de construcción: 1878-1881
Estilo: Neogótico

Forma parte del conjunto de Sobrellano, constituyendo un claro ejemplo de reacción pintoresca frente al clasicismo.

Para la construcción, el arquitecto, siguió modelos del gótico perpendicular inglés y centroeuropeo, dando lugar a una catedral en miniatura, acorde al espíritu profundamente religioso del artífice y de Don Claudio López Bru, segundo marqués de Comillas.

En su interior se levantaron los panteones del primer marques, su hermano Claudio y el segundo marques; El Panteón de Don Claudio López y López y Doña Benita Díaz de Quijano (1881) Constituye un destacado ejemplo de la escultura catalana modernista en Cantabria. Las esculturas de la “Plegaria” y la “Resignación” denotan la influencia del estilo Rodin y parece relacionarse con la luz y la atmósfera que las envuelve; los tres fueron realizados por destacados escultores catalanes modernistas como Jose LLimona y Barbany y Agapito Vallmitjana.

Dentro de la capilla, el prebisterio se ornamentó suntuosamente con el altar y mesa de bronce pulido, el frontal con los símbolos de los Evangelios y el Agnus Dei, y la imagen del Sagrado corazón de Jesús. También se añadió el mobiliario diseñado por Gaudí, aun de aires góticos, pero que anuncia el modernismo.

La inauguración de la capilla-panteón, coincidió con la visita de Alfonso XII a Comillas en 1881.

El exterior del recinto de Sobrellano es practicable en silla de ruedas por un camino alternativo. Sin embargo, para poder acceder por esta entrada es necesario ponerse en contacto previamente con la taquilla del Palacio.

El interior de la capilla es accesible, ya que se trata de una planta principal que no cuenta con escaleras ni escalones.

 

El Palacio de Sobrellano

Arquitecto: Joan Martorell
Dirige: Cristóbal Cascante
Mobiliario: Cascante, Camilo Oliveras
Pintura: Juan Roig, Eduardo Llorents
Año de construcción: 1882-1888
Estilo: Neogótico

El conjunto de Sobrellano, comenzado con la capilla-panteón, se completa con las obras del palacio.

En 1888 se inauguró el palacio de Sobrellano, en el que se recogían diferentes tendencias, que iban desde el gótico civil inglés hasta el recuerdo de los palacios venecianos, pasando por un tratamiento de los relieves cercano a los mocárabes musulmanes.

En cualquier caso la estructura del edificio resulta muy poco gótica. El sencillo esquema palladianp(con un hall central distribuidor y escalera monumental de mármol blanco, con doble tiro e iluminación cenital por una claraboya de vidrieras policromas) genera un paralelepípedo casi perfecto, apenas roto por retranqueos.

Tan monótono esquema se rompe a base de ornamentación, generosa en la fachada principal; mientras en la fachada zaguera más contenida.

Este palacio es en realidad un espacio para ser mostrado, un espacio de aparato cargado de objetos y elementos que reflejaban la personalidad de los marqueses de Comillas.

El gran salón se concibió como el centro simbólico del palacio, decorándose con ocho paneles pintados por Eduardo Llorens, que mostraban las aportaciones que la familia del marqués había realizado a la historia reciente de España.

El exterior del recinto de Sobrellano es practicable en silla de ruedas por un camino alternativo. Sin embargo, para poder acceder por esta entrada es necesario ponerse en contacto previamente con la taquilla del Palacio.

Para entrar al interior del monumento hay una rampa de acceso, pero solamente es visitable la planta principal, puesto que no hay ascensores para llegar al resto de pisos.

 

El Capricho de Gaudí

Arquitecto: Gaudí
Dirige: A. Cascante
Año de construcción: 1883-1885
Constructor: José Pardo
Estilo: Modernista

Esta residencia de verano se construyó en 1883 por encargo de Máximo Díaz de Quijano, concuñado del Marque de Comillas y con la dirección del arquitecto Cascante Colom según plano de Gaudí.

El capricho consta de semisótano, piso y buhardilla, con una torre lateral que resalta por su verticalidad en un conjunto marcadamente horizontal .En la planta noble destacan un salón a doble altura, un comedor unas cuantas habitaciones, mientras que en el semisótano y en la buhardilla estaban la cocina la cochera y otros espacios para el servicio.

Sobre un impresionante zócalo de piedra, las fachadas muestran la alternancia de franjas horizontales de ladrillo visto y frisos de cerámicas con los motivos vegetales de la flor y la hoja de girasol, presentes también en el friso superior, en la torre y en los testeros de las aperturas.

Encima del porche de entrada, formado por columnas robustas con curiosos capiteles ornados con representaciones naturalistas de hojas de palma y golondrinas se alza la torre mirador, en cuyo interior una escalera de caracol permite subir hasta la parte más alta, acabada en un templete.

Tanto encima del porche como en la parte superior de la torre hay una barandilla circular de hierro con montantes que adoptan la forma de latigazo y tiene una decoración de hojas de parra.

Otros elementos destacados son los balcones de hierro, que cuentan con unos bancos de listones de madera para sentarse y un baldaquino, también de hierro, y las ventanas de guillotina, que al abrirse o cerrarse, suenan con tonos diversos, gracias unos contrapesos.

Todo el recinto exterior del Capricho de Gaudí es accesible en silla de ruedas. Sin embargo, las condiciones del terreno, realizado en piedra, pueden ser incómodas. Recomendamos siempre que contacte con nosotros para que le demos indicaciones más precisas.

Existen rampas de acceso para llegar a la planta principal, que es visitable en su totalidad con silla de ruedas. Lamentablemente, hay dos desvanes a los que se accede por escaleras de caracol que no son accesibles en silla de ruedas o para personas con una movilidad reducida

Puedes visitar el Capricho de Gaudí con tu perro guía o con tu perro de ayuda si quieres. Podrás disfrutar del exterior y del interior del edificio sin ningún problema. Las personas en silla de ruedas o invidentes tienen acceso gratuito y cuentan con otra gratuidad para su acompañante.

Fuente de los tres caños

Arquitecto: Doménech i Montaner
Época: finales del S XIX (1899)
Estilo: modernismo

Levantada en la Plaza del mismo nombre (hoy Plaza de Joaquín del Piélago), en agradecimiento a D. Joaquín del Piélago, hijo político del primer marques, por su generosa aportación para las obras de traída de aguas a Comillas.

Doménech plantea una columna central con tres registros laterales. La ornamentación incluye: cartelas con los textos de agradecimiento, motivos vegetales de vago recuerdo gótico, corona y cruz patada con brazos acabados en botones rematando la columna, cenefas florales y ángeles; destaca el delfín enroscado como tema acuático central.

Monumento a pie de calle practicable con suelo empedrado.